Desde hace cinco años, el número de afectados por el polémico anticonceptivo Essure de Bayer ha ido en aumento en Salamanca hasta alcanzar las 200 mujeres conocidas que sufren secuelas derivadas de la implantación del muelle. Tras varios años luchando como plataforma, las afectadas acaban de constituir la Asociación en Defensa de las Afectadas por Essure (ADAE) en Castilla y León para exigir de forma urgente a la Consejería de Sanidad que elabore un protocolo de atención integral que atienda a estas mujeres en todos los centros de salud y en la red hospitalaria de la comunidad autónoma.

Así lo explica Tamara Nuño, salmantina y presidenta de la nueva asociación regional, que denuncia que hace unos meses ya formularon una batería de preguntas a la Consejera de Sanidad Verónica Casado, con el respaldo del grupo socialista en las Cortes, en relación a la problemática . “Sus respuestas dejaron al descubierto la falta de empatía y un absoluto desconocimiento sobre la verdadera situación de los pacientes de Essure en CyL, además de mostrar una manifiesta falta de interés por todas las cuestiones que la planteamos”, critica Nuño.

La presidenta de ADAE confirma que la atención a los afectados por el anticonceptivo y retirado del mercado en Salamanca y en la Región “es muy deficiente”. “Existe una guía obsoleta, no obligatoria y que cada médico interpreta libremente. Muchos médicos de Atención Primaria no saben lo que es el Essure y no asocian los síntomas al método anticonceptivo. Por eso creemos que hay muchas más mujeres afectadas, al menos otro centenar más en Salamanca, que desconocen el origen de sus problemas en la piel, dolores de cabeza, enfermedades autoinmunes ... ”, señala Tamara Nuño.

Desde ADAE reclaman un protocolo integral para que desde Atención Primaria se conozca Essure, los problemas que da y se dirija a las pacientes al hospital. “Sacyl debe garantizar un mejor diagnóstico a las afectadas, intervenciones para la explantación del anticonceptivo menos traumáticas y más exitosas junto al tratamiento y seguimiento de las secuelas”, reclama la asociación, que presentará una Proposición No de Ley en las Cortes de Castilla y León .

“En Ginecología del Hospital, depende qué profesional te toque, te mandan al psicólogo, te hacen pruebas o no ... Algunas afectadas han sido operadas tras un año de lucha, otras han sufrido serios problemas en la operación como la perforación del intestino” , denuncia Tamara Nuño.

La Asociación en Defensa de las Afectadas por Essure (www.adae.es y essurecyl@gmail.com) nace con los objetivos de informar a las afectadas sobre los efectos secundarios y los distintos recursos sanitarios que disponen para, en la medida de los posibles , recuperar su salud. ADAE también colaborará con fundaciones, agrupaciones y asociaciones de trabajadores sociales con el fin de llegar a todas las mujeres perjudicadas por este implante anticonceptivo, que se encuentren en riesgo de exclusión social, en situaciones más vulnerables o con discapacidad.

Essure es un anticonceptivo permanente no hormonal de Bayer que ya ha sido retirado del mercado. Consiste en un pequeño muelle: una bobina externa de Nitinol (aleación de níquel y titanio) y una bobina interna de acero inoxidable envuelta en fibras de tereftalato de polietileno, unas bandas marcadas de platino y una soldadura de plata-estaño. Mide cerca de 4 cm. de longitud y 0.8 mm. de ancho. Mediante un histeroscopio era introducido por vía vaginal hasta las Trompas de Falopio, se va generando tejido alrededor y quedan incrustados impidiendo el paso de óvulos ni esperma.

Una de las causas de que afecte a las mujeres es que está hecho con níquel y un 15% de las mujeres son alérgicas. También puede causar una inflamación crónica de las trompas de Falopio y que nunca remite. Otro problema es que, en ocasiones, se mueve.

Según las fuentes oficiales, más de 80.000 mujeres en España confiaron en este método, de las cuales, más del 10% ya ha presentado efectos secundarios que les impide llevar una vida normalizada, viéndose inmersas en un peregrinaje desesperante, acudiendo a diferentes servicios de salud con la esperanza de ser diagnosticadas. Cansancio, fatiga, dolor pélvico, inflamación abdominal, dolor de articulaciones, dolor muscular, menorragias, dolor de cabeza, ansiedad, aumento de peso, problemas digestivos, dolor menstrual, gas, dificultad para la concentración, falta de memoria, insomnio, gas, apatía, contracciones uterinas, dolor en las relaciones sexuales con penetración, erupciones cutáneas, parestesias, candidiasis ... Estos son los síntomas más reconocibles entre las portadoras del implante.

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